Con los tiempos que corren, debemos contar con productos que nos aseguren facetas tan importantes como nuestra salud.
A continuación te dejamos claves para que evalúes la cobertura del seguro médico. Y así saber restricciones y servicios a los que tienes derecho. Según la la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), en México un 5% de las personas cuenta con un Seguro de Gastos Médicos Mayores (SGMM).
El contar con un SGMN constituye dar seguridad frente a un imprevisto en nuestra salud. Será un apoyo económico para afrontar dicha situación.
Dependiendo del SGMM que contrates, éste puede cubrir emergencias que sufra el beneficiario en el extranjero, partos normales o por cesárea, cirugías, rayos x, ultrasonido, estudios de laboratorio, servicios de ambulancia, pediatría y oftalmología, entre otros, según información de la AMIS.
A continuación te dejamos ciertos puntos a tener en cuenta para contratar tu SGMM:
- Asesorase con un agente de seguro médico: Tu asesor debe contar con cédula vigente de la Comisión Nacional de Seguros y Fianzas (CNSF).
- Compara servicios y precios: No te guíes solo por el valor de la póliza. Lo ideal es hacer una evaluación profunda de las coberturas contratadas.
- Evalúa la cobertura necesaria para tu familia: Elegir la opción que mejor se adapte a las necesidades de tu familia es fundamental. Ya que esto garantiza que obtendrás los mayores beneficios cuando alguno de tus seres queridos tenga que usar el seguro.
- Considera la cobertura adicional y otros servicios: Servicios como la cobertura dental, por ejemplo, pueden ser factores decisivos que quizá quieras contratar. Estos elementos pueden hacer una gran diferencia a la hora de calificar el valor agregado de tu seguro.
- Valora la experiencia: En la CNSF puedes consultar la lista de las compañías que cumplen con todos los requisitos para ofrecer servicios en el país.
- Verifica que la aseguradora te garantice renovación vitalicia: Asegurarse que tu póliza se contrate de manera vitalicia. Independientemente del estado de salud o tu edad.
- Revisa a fondo la cláusula de preexistencia por antigüedad: Asegúrate de que la compañía que elijas cubra las preexistencias. Siempre y cuando no haya habido manifestación alguna de síntoma relacionado con la enfermedad en un periodo largo de tiempo.
- Pregunta por los tiempos de espera y los padecimientos que lo requieren: Lo ideal es que los tiempos de espera para atender padecimientos específicos sean los menores.
- Considera los beneficios fiscales: Consulta con tu asesor. Algunos seguros ofrecen componentes como descuento o deducción para el pago de impuestos.
- Mantén hábitos saludables: Puede ser un factor clave que influya en la cotización de tu póliza. Principalmente en la cobertura para adultos.